C. H. 

Hace unos años, mi vida ‘paró’. Mi cuerpo y mi mente me dijeron: ‘¡Basta!’. Pasé unos meses sin poder salir de la cama. Estaba exhausta y deprimida. Una amiga me aconsejó probar Pressel y hablar con Mercè. Sólo escuchar su voz al otro lado del teléfono, supe que había encontrado a alguien que me iba a ser de gran ayuda. Después de relativamente pocas sesiones, empecé a sentirme con fuerzas para afrontar mi día a día con la familia, el trabajo… El masaje me ha ayudado y me sigue ayudando física y emocionalmente a traer al presente recuerdos, relaciones y experiencias del pasado que necesitaban atención. Creía que debía buscar las causas de mis problemas fuera. Pero con Pressel he podido comprender que forman parte de mí y que siempre lo harán y que, por tanto, no hace falta deshacerte de estas vivencias: Las puedes transformar en algo que te sirva para aprender y aceptarte como eres. Gracias al Pressel, he aprendido tantas cosas a nivel personal, que es un método de masaje que seguiré haciendo durante toda mi vida. De hecho, mi hija de once años también ha hecho algunas sesiones porque sé que es de los mejores regalos que puedo ofrecerle.

R. S.

Conocí a Mercè Bas gracias a una amiga en común que me habló maravillas sobre ella y el Pressel. Como soy muy curiosa y estaba pasando un momento de cambios, decidí reservar hora para conocer de cerca este tratamiento. La verdad es que es sorprendente: no había conocido hasta entonces ningún masaje como éste y eso que, a lo largo de mi vida, me he hecho unos cuantos. La primera sesión no me llamó mucho la atención, ya que tenía el cuerpo bastante colapsado y Mercè no quiso apretar demasiado mis piernas. A partir de la segunda, el masaje me pareció maravilloso y, desde entonces, me he sentido muy bien siempre que Mercè me hace este masaje, porque me ayuda a conectar conmigo misma. Además, Mercè se vuelca en hacer los pasos, que son muy relajantes y te dejan con una gran sensación de paz y bienestar. Puedes ser escéptica respecto a los resultados, ya que te pueden parecer un poco ‘filosóficos’, pero puedo constatar que, tal y como ella misma me dijo al comienzo, ‘me noto que soy más yo’: razono con la claridad que tenía de joven -ya que llevo unos años un poco ‘empantanada’-, tengo más energía y, en general, me siento mucho mejor conmigo misma.

A. I. 

Descubrí el Pressel en un momento vital bastante convulso. Había demasiados estímulos, proyectos, personas y emociones a mi alrededor, en mi día a día que no me permitían tener estabilidad. Este proceso me ha servido para encontrar mi centro, mi yo, tanto en el ámbito físico como en el emocional. El masaje Pressel me ha permitido conectar conmigo misma y mantenerme en esta conexión, pase lo que pase en mi entorno. Si lo tuviera que resumir en tres palabras, diría que me ha dado solidez, verticalidad y estabilidad en todos los ámbitos que me conforman como persona.

R. L.

El masaje Pressel me ha ayudado muchísimo, tanto físicamente, en la postura, para acabar con la hinchazón que tenía y relajar mi cuerpo, como psicológicamente, porque me encuentro más tranquila y en paz.

A todo esto sumamos la comprensión y la profesionalidad de Mercè, que te cuida con tanto mimo que es un regalo. Mi puntuación es de un 10. Para mí ha sido un antes y un después. ¡El masaje Pressel me ha sorprendido tanto! Mil gracias por todo, Mercè.

M. G. 

Mercè es una excelente profesional y mejor persona. Desde que empecé con su tratamiento de Pressel, en pocos meses noté una gran mejoría en mi vida. Se lo recomendaría a cualquier persona que quiera mejorar su estado anímico y energía vital. Me siento muy agradecida de haber dado con ella: para mí es un gran referente tanto a nivel profesional como personal. Lo que Mercè hace no es magia, es Pressel. Y funciona, y mucho. Además que el trato con ella es excelente y rápidamente te das cuenta que tiene un don que ha puesto al servicio de las personas. ¡Muchas gracias, Mercè!

M. A. S.

Estaba en un momento de mi vida bastante complicado tanto física como anímicamente. Un amigo médico me dijo que me iría muy bien que Mercè me hiciera unas sesiones del masaje Pressel. Tardé un poco, pero al final hice caso y fui. Conocer a Mercè (su forma de trabajar, su cuidado y su profesionalidad) fue para mi la solución a una situación que me impedía llevar una vida normal. Ahora solo puedo dar gracias a Mercè y al Pressel, porque mi calidad de vida ha cambiado en todos los aspectos y me siento más fuerte para afrontar los días, tanto física como anímicamente. Moltes gràcies, Mercè!.

M. G. 

Quiero agradecer a Mercé Bas por ayudarme con el masaje Pressel en un periodo de crisis en el que perdí las fuerzas anímicas para sostenerme. Poco a poco he recuperado esas fuerzas y he tomado conciencia de que no debemos dejarnos y acudir a profesionales como ella cuando nos veamos desbordados. ¡Gracias, Mercè, por tu gran ayuda!